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Entorno Natural de Manganeses de la Lampreana
Manganeses de la Lampreana cuenta con un entorno natural previlegiado ya que cuenta con múltiples lagunas que conforman todas ellas la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila. Entre todas ellas destaca la denominada La Laguna Grande. Manganeses también está considerada como zona natural de la Reserva Nacional de Caza de las Lagunas de Villafáfila. Las lagunas se sitúan en una zona de encuentro de las tierras de Campos y del Pan, correspondiente al interfluvio de los ríos Esla y Valderaduey
Este ecosistema que se forma como consecuencia de las lagunas, es tan preciado dada su riqueza natural tanto en su flora como en su fauna que cuenta con el reconocimiento europeo a través de la inclusión de este espacio en las Zonas Húmedas de Importancia Internacional y por haber sido declarada Zona de Especial Protección para las Aves, en el marco de la Red Natural
Las lagunas se encuentran situadas en medio de un gran paisaje de cultivo de cereales lo que confiere a este lugar una belleza especial sobre todo en las horas en las que sale y se pone el sol. Lo reseñable de estas lagunas es que son hogar de multitud de aves migratorias donde descansan dependiendo de la época, lo que convierte a este enclave protegido en una de las áreas de invernada más importante de la península ibérica. También cabe destacar que en las zonas de secano también de alto valor natural y paisajístico destaca la avutarda que es una de las mayores poblaciones controladas de Europa
Los paisajes de esta zona se caracterizan por tener espacios amplios y llanos con escasas pendientes y amplios horizontes donde el cultivo del cereal destaca sobre los demás. En el centro se encuentran las lagunas de carácter salino y estacional. La vegetación y la flora están condicionadas por una serie de características propias de esta zona como es el intenso frío que hace en invierno y la sequía que suele producirse en verano de ahí que las especies que habitan en ella tienen que ser capaces de resistir estos cambios estacionales. Un hecho que lo certifica es la escasez de árboles que se da en este lugar y la existencia de plantas herbáceas y arbustos pequeños. Entre las especies de este tipo de vegetación destaca el gramón y la castañuela de los brotes de esta última se alimentan gran parte de las aves de la zona. En las zonas más secas destaca la presencia del cereal como la cebada, el trigo y la alfalfa de secano
La existencia de estas extensiones de cereales permiten que perviva una de las mayores poblaciones de avutardas, como ya hemos mencionado anteriormente, pero también destacan otro tipo de especies como el aguilucho, el sisón y la ortega entre otros. La existencia de la laguna favorece la presencia de aves acuáticas, en ella se registra casi el cincuenta por ciento de las aves censadas en Castilla y León. También existe una amplia población de aves nidificantes entre las que cabe resaltar la cigüeña blanca, el azulón, el pato cuchara, el zampulllín, el ansar común, la grulla, el ánade friso…
Quien desee disfrutar de este entorno natural y obtener más información y conocimientos las lagunas cuentan con la denominada Casa del Parque construida siguiendo los antiguos modelos de los observatorios y almacenes reproduce uno de us edificaciones más emblemáticas como es el «palomar». En su interior alberga varias salas donde se ofrece información más detallada de las lagunas y donde se informa de rutas o recorridos que se pueden realizar para que la visita sea lo más provechosa posible. Tras la visita al Centro de Interpretación ya estamos preparados para recorrer el Parque de Fauna
