RECUERDOS DE UN AÑO DE PANDEMIA: DOMINGO SANTO EN MANGANESES DE LA LAMPREANA PROCESIÓN DE LA VIRGEN Y DEL CRISTO RESUCITADO

El domingo santo asistimos a una popular ceremonia que se capitula en la Semana Santa de Manganeses. En la mañana del Domingo de Resurrección la Virgen cubierta por su manto negro, enlutada, acompañada de todas las mujeres del pueblo se dirigen en procesión hacia la Plaza España saliendo por la derecha hacia la Calle La Miel.

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El Resucitado una talla alegre y dinámica cubierto por el paño de la pureza, mostrando al aire el orificio de la lanza en el pecho y portando en la mano derecha una cruz dorada con un banderín que refleja la resurrección. Esta imagen procesiona acompañada de los hombres, niños y jóvenes del pueblo saliendo por la parte izquierda de la iglesia y dirigiéndose hacia la Plaza de España a través de la calle de los Remedios.

En la Plaza de España se celebra el ansiado encuentro de la virgen con su hijo resucitado. Al hallarse las dos imágenes frente a frente, hacen tres reverencias tanto la Virgen como el Resucitado. La Virgen es despojada  de su manto negro, luciendo una túnica y manto blanco.

 

Juntos regresan en procesión hacia la iglesia para celebrar la liturgia. En años pasados, cuando el tiempo era muy bueno, la misa se celebraba en la propia plaza de España, frente al Ayuntamiento.

 

Esta noche pasada, será una noche triste  porque los quintos no podrán cumplir la tradición de ir a cortar ramas de encina para ponérselas a las jóvenes en sus ventanas. Hoy Manganeses amanecerá  triste, al no ver las casas, engalanadas con esas ramas como manda la tradición. El Coronavirus ha evitado que se cumpla esa tradición, pero el pueblo de Manganeses volverá el año que viene a cumplir esas tradiciones y otras más.

Vídeos elaborados por Guillermo Bueno.

Voces en off: María José Salvador

Música de Semana Santa: Banda Municipal de Villamayor de Armuña dirigida por José Luis Sagredo. Durante esta Semana Santa virtual nuestras preciosas  imágenes procesionales han estado acompañadas de obra de música como:

«Nuestra Madre». Compuesta en 2002 por Pedro Hernández Garriga. La dedicatoria es para Nuestra Madre de las Angustias de Zamora de la que el autor es cargador. *

«Nuestro Padre Jesús». Obra de Emilio Cebrián del año 1935 para el «Abuelo» de Jaén.

«Crucifixión». El autor es el zamorano Jaime Gutiérrez. La compone en el año 2001. Está dedicada al Paso del mismo nombre de la Semana Santa de Zamora, obra de Ramón Álvarez con motivo de la puesta a hombros de este grupo escultórico.

«Mater Mea». Ricardo Dorado Janeiro. Año 1962

«Corona». Compuesta en el año 2001 por Juan Carlos de la Fuente.  Marcha de carácter muy solemne que contiene una saetilla desgarrada e interpretada por el saxo alto. Está dedicada a la memoria del padre del autor, Fernando de la Fuente, apodado cariñosamente «corona». **

«Getsemaní». Ricardo Dorado Janeiro. año 1960.

«Lux Aeterna». Compuesta en 2004 por José Igancio Cotobal. A diferencia de la mayoría de las marchas procesionales, no está dedicada a Imagen o Cofradía alguna. El título en latín, está extraído de la Liturgia tradicional del oficio de difuntos. La dedicatoria no es únicamente a la Pasión de Cristo, sino por estensión, a la muerte como destino del ser humano. **

«Aurora Frontale». Obra del autor jienense Manuel Rico Gómez. Marcha basada en temas andaluces, dedicada a la nieta del autor. Manuel Rico ejerce de profesor de trombón desde hace mas de 40 años en la Banda Municipal de Salamanca. **

«Noche de Soledad». Su autor es Matías Cañizal Tello en el año 2006. La dedicatoria es a la Virgen de la Soledad de Salamanca. En sus notas quiere narrar la Procesión de Ntra. Sra. de la Soledad en la madrugada del Viernes al Sábado Santo por las calles de Salamanca. Comienza con una  introducción que expresa la salida de la Imagen y el «tuti» de la Banda representa la alegría del pueblo. Esta alegría se calma y aparece un clima de sobriedad que representa el tránsito por las calles de Salamanca hasta la entrada en la Plaza Mayor, donde comienza el trío de la marcha, que está representado en el canto de una saeta plasmada en la obra con un pasaje basado en una cadencia andaluza. El final de la marcha con la banda a «tuti», expresa la esperanza del pueblo de volver a ver a la Soledad al próximo año.

«El Dolor de una Madre». Grandiosa composición de Ángel Rodríguez Miguel, dedicada a la Dolorosa de la Cofradía de la Vera Cruz de Zamora.

«La Saeta».

«La Madrugá». De Abel Moreno. Año 1987.

 

– Bibliografía: La Semana Santa en Castilla y León. Varios autores. Junta de Castilla y León.